Bueno... No, me falta toda la edición ToT Pero cada vez estoy más cerca del final :3
Entonces miró de nuevo a Sakti, en busca de algo, una pequeña señal, una ligera pista. Pero deseaba no encontrarla, deseaba que... Ah, pero ahí estaba. La princesa miraba hacia el risco que se hacía cada vez más pequeño conforme el barco se alejaba con rumbo al Reino de las Arenas. ¿Cómo no pudo haberlo notado antes? ¿Cómo era posible que Dereck, los chicos, que Sigfrid y el mismo Emperador no notaran lo que sucedía frente a sus narices? ¿O quizá alguno sí lo había notado, pero había dejado que siguiera su curso por interés propio o porque no había nada que hacer?
Los ojos grises de Sakti siempre lo habían confundido. Ese color era triste y profundo por sí solo, pero a veces... No, muchísimas veces, tantas que hasta era común, esos ojos cambiaban. Se hacían más fríos, más salvajes, más crueles. Aunque los ojos de los aesirianos fueran más fuertes que los de los humanos, no había razón para que una muchacha tuviera los ojos de una bestia. Esos ojos que miraban a través de Sakti no eran los de la portadora. ¡Maldita sea! ¡Eran los del Dragón! Ahí, a su lado, estaba el Primer Dragón, mirando en lugar de su portadora, tocando la baranda del barco con los dedos de la princesa, pensando con su cerebro. ¡Esa era...!
Tercer volumen
Interludio IV: Fusión, condenación
Fecha de publicación: viernes 24 de setiembre, 2010
No hay comentarios :
Publicar un comentario
¡Anímate a comentar! Gracias por visitar mi blog ;)